Sergio Soler, ¿podría enfrentarse a un serio problema?

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Algunas veces, los youtuber no saben donde está el límite. Viendo lo que hacen algunos famosos como Justin Bieber, que siempre salen indemnes de todas sus acciones, creen que podría hacer lo que quisieran y luego colgarlo en su canal sin tener consecuencias. No obstante, Sergio Soler, más conocido en la plataforma como MrGranBomba, podría meterse en un problema por el “caso cara anchoa“.

Fue legítima defensa según algunos

Para quién todavía no esté metido en situación con respecto a esta persona, hace unos días este youtuber salió a la calle para grabar un vídeo en la ciudad de Alicante, donde él reside. Durante varios minutos fue parando a diversos transeúntes preguntándoles sobre una dirección. Algo que podría parecer normal y hasta se podría considerar como un “estudio sobre si la gente es amable o no”. No obstante, la forma de dirigirse hacía ellos no era la más adecuada.

“Boca-chancla”, “Escupe mierda”, “Tontolaba”… eran algunos de los insultos que este joven lanzaba al mismo tiempo que preguntaba sobre la dirección a la que “supuestamente” quería ir. Al principio más de uno no hacía caso a sus comentarios y pasaban por alto los insultos. Incluso más de uno le avisó de que podría acabar recibiendo “una lección”.

Sergio Soler, ¿podría enfrentarse a un serio problema?

Y al final la lección la recibió por parte de un repartidor, al que se dirigió con el apelativo de “Cara anchoa”, pero no una única vez, sino varias veces. Además, lo grabó y posteriormente lo compartió en su canal de youtube, habiéndose hecho famoso por este “apelativo”. Debido a la falta de respeto, le propinó una buena bofetada al joven.

Ahora es cuando viene la parte importante sobre el asunto, ¿quién de los dos tiene razón cara la ley? Según defiende el letrado del repartidor, Carlos Manuel Figola Espinosa, el repartidor de ha convertido en una persona famosa por la calle y muchos le reconocen. Además, acusa al famoso youtuber de haber realizado una grabación ilegal puesto que su defendido en ningún momento aceptó que se hiciera pública, y el hecho de estar pixelado no genera ninguna duda de que se trata del repartidor.

Algunos dicen que la acción del repartidor fue “legítima defensa”, debido a que lo llamó “caranchoa” mientras este estaba trabajando y sin mediar provocación por parte de él, lo que se consideraría agresión verbal.

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